Y así fue como te convertí en poema.
Porque todo es tan contradictorio, no importa las vueltas que dé, siempre regreso al Punto cero.
Porque aún sigue siendo mejor lo que hay acá.
Detrás de mí puerta.
Porque aún sigue pesando aquella historia. Porque aún volves a mí.
El Punto cero, mí Punto de encuentro.
Porque aún sigue siendo mejor mantener los ojos abiertos.
Porque aún te veo.
Porque sos mí Punto cero.
Porque entonces así a veces te suelto, detrás de cada letra, a veces te dejo.
También a veces me perdono, y me miro de reojo.
Y vuelvo al Punto cero.
Donde todo vuelve a empezar, una y otra vez pero nunca en el mismo lugar.
Y fue así como te convertí en poema.
Para despedirte sin escándalos, sin dramas, sin que te enteres.
Vos, que sos mí Punto cero.
El Punto mudo.
La vuelta al mundo,
Gritando para adentro.
Yo te guardo en ni anotador,
Como algo inspirador.
Te llevo siempre en mí bolsillo y para ser sincera también te llevo ahí en mí corazón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario