Encontré algo por lo cual debo agradecerte. Si, a vos.
De vez en cuando,
cuando me atropella tu recuerdo, cuando apareces como un fantasma, cuando asaltas mis redes sociales, mí razón, mí medida, mí tolerancia, mí paciencia y mí amor propio se diluyen en el aire. Y caigo.
Pero caigo un poco. Ya no tanto como 365 días atrás.
Entonces te agradezco eso, te agradezco haberle perdido el miedo a caer, saber que nos caemos y nos levantamos las veces que sea necesario para dar un salto alto, amplio y crecer.
Te agradezco por hacerme crecer a través del dolor , a través del desconocimiento que generaste en mí.
En la soledad extrema a la que me llevaste, porque hiciste que me amara a oscuras y frente al espejo.
Lograste que me armara de palabras y que las usará a mí favor, llenando miles de hojas en blanco.
Lograste tranquilizarme y dedicarme a vivir hoy.
Reconocí en mí cosas que había olvidado. Tenía fuerzas al final.
Era fuerte a pesar de todo,
y ¿Qué es todo?, Todo es caer y levantarse, todo es saber que nada es absoluto.
Todo es saber que mañana será otro día.
Todo es saber que llorar ahoga pero sana.
Todo es hablar,
sortear los parasiempre y enfrentar el nunca más.
Todo soy yo, con todo lo que soy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario